En ese sentido, calibrar la batería del móvil es importante, porque nos ayudará a conseguir que la batería tenga una mayor durabilidad y que nos ofrezca un rendimiento superior.
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¿Por qué calibrar la batería del móvil?
Calibrando la batería del móvil no significa que esta vaya a tener una mayor duración. No se trata de eso. Tenemos que entender que el calibrado de la batería lo que hace es que el indicador de batería del móvil que se muestra en pantalla nos informe exactamente de la capacidad de batería en la que se encuentra el móvil.
No es algo fácil de calcular, dado que en este proceso juegan un papel importante diversos factores, como la capacidad de la batería, el punto máximo de la carga de la misma o el último periodo de tiempo en el cual la hemos cargado.
Se combinan unos algoritmos de gran profundidad que tienen que estar siempre en sintonía para que ejerzan un trabajo conveniente. Si alguno falla, la cifra de batería, el calibrado, no estará haciéndose en condiciones.
Explicado esto, podemos entender porqué es importante que la batería esté calibrada:
- Por un tema práctico: Si en la pantalla leemos 40% de batería disponible podemos relajarnos pensando que aún nos queda batería suficiente para pasar las próximas horas. ¿Pero qué pasaría si de repente, aún viendo ese 40% en pantalla, el móvil se apaga? Eso puede ocurrir si la batería no está calibrada de forma conveniente. Y eso supone un problema si no tenemos el cargador, un enchufe o un power bank que nos permita encender de nuevo el móvil.
- Por un tema de durabilidad: También es positivo que la batería esté calibrada para que carguemos el teléfono dentro de los límites que establece el fabricante. Ya sabéis que es poco recomendable dejar que el móvil se apague o que baje del 20%, así que esto es algo para lo cual necesitamos que la batería esté bien calibrada.
¿Cómo calibrar la batería de un celular Android?
El calibrado de la batería es recomendable que lo hagamos cada tres meses más o menos, especialmente si tenemos dudas de que se ha producido un desajuste. No recomendamos depender de aplicaciones “mágicas” que prometan grandes resultados, dado que por regla general son todo historias para hacernos descargar ciertas apps.
- Comenzamos conectando el móvil con su cargador. Si tenemos oportunidad también podemos retirar la batería y utilizar un cargador de conexión externa. Tenemos que esperar a que el volumen de la batería haya alcanzado el 100%. Aunque en pantalla ya se nos indique que está al 100%, vamos a esperar un poco para tener seguridad completa de ello.
- Ahora quitamos el móvil de la corriente o ponemos la batería en el teléfono si la hubiéramos quitado para cargarla.
- Después comenzamos a usar el dispositivo con la intención de vaciar la batería. El móvil tiene que apagarse por sí solo, así que aunque veamos que la batería está llegando al final, no lo apaguemos por nosotros mismos. Si tenéis problemas para vaciar la batería lo mejor es que descarguéis apps especializadas en ello o que juguéis con los juegos más avanzados, dado que consumen muchos recursos y eso se materializa en que la batería se agota con rapidez.
- Luego procedemos a esperar un total de 4 horas en las que no encenderemos el móvil. Lo que ocurrirá en este proceso es que la batería comenzará a expulsar toda la energía que quedara en su interior, dado que siempre queda parte de esa energía a modo de residuo.
- Pasadas las cuatro horas repetimos el primer proceso para proceder a la carga y esperamos al 100%, dejando unos minutos más como margen de seguridad.
- Finalmente, con eso habremos acabado el proceso de calibración y el porcentaje que se muestre en pantalla debería ser el correcto.
¿Cómo calibrar la batería de un iPhone?
En el caso de que tengamos un iPhone el proceso va a ser un poco más complicado. Una diferencia respecto a los móviles con Android se encuentra en que Apple recomienda que calibremos la batería una vez cada 30 días, lo que resulta un poco exagerado y, por otro lado, poco realista, dado que hay pocas posibilidades de que lo hagamos de forma tan frecuente.
- El primer paso es cargar el móvil al 100% y siguiendo lo que hicimos con un móvil Android, dejamos que la batería siga cargándose durante unos minutos más.
- Después quitamos el cable de la corriente.
- A continuación, empezamos a usarlo esperando a que la batería se haya descargado al completo. Como decíamos antes, hay juegos y aplicaciones, o incluso la reproducción de vídeo, que ayudan a que la batería se agote más rápidamente.
- Apple recomienda que después de que se apague el móvil lo dejemos apagado entre seis y ocho horas, periodo en el cual como ocurre en Android, se liberará la carga residual que pueda tener el smartphone.
- Luego cargamos el móvil, pero no hasta que veamos el indicador del 100% en la pantalla, dado que es preferible que el móvil esté apagado. El periodo de tiempo a esperar durante la carga será también de entre seis y ocho horas. Si queremos encender el teléfono debería ser en el modo de avión.
- Cuando hayan pasado las horas de carga lo encendemos o quitamos el modo avión y comprobamos que la batería está al 100% y calibrada de una forma perfecta. Esto último será algo que podremos verificar al ver que no se vuelve a producir ningún tipo de sorpresa en cuanto a la variación de la carga del móvil respecto a lo que habíamos visto en pantalla que teníamos disponible.
Para asegurar la salud de la batería a largo plazo este es un proceso que debemos realizar frecuentemente.
Experto en tecnología móvil